En pleno centro de la ciudad de Valencia, al lado de la modernista estación del Norte y camuflado entre las fincas que lo rodean existe un lugar mágico. Un lugar al que se accede por un estrecho pasadizo en penumbra con las paredes repletas de fotografías y recortes de prensa que nos hablan de su glorioso pasado.
Al final del pasaje un modesto bar que permanece anclado en el tiempo y en el que un grupo de parroquianos pasa el tiempo tomando algo y echando la partida, sirve de antesala al recinto deportivo mas antiguo de Europa:
El Trinquet de Pelayo.
Abierto desde el 20 de agosto de 1868, han pasado casi 150 años de historia para la "catedral" de la pelota valenciana. Una cancha donde los mejores pelotaris de la historia han brindado las mas brillantes tardes de gloria a un deporte que esta inmerso en el adn de los valencianos. Aunque muchos de esos valencianos no lo saben y nunca han traspasado ese umbral mágico.
Ahora Pelayo ha cerrado sus puertas y si no lo remedian, quizá no vuelve a abrirlas. Esperemos que eso no suceda y podamos disfrutar de alguna de esas tardes míticas en el futuro. #Salvem Pelayo
